Éteres en la Odontología.
La Odontología es una rama de las ciencias de la salud, responsable de proteger
la salud bucodental de las personas, previniendo y remediando enfermedades orales
tales como, las caries, las patologías periodontales, hasta procesos quirúrgicos,
traumatismos y cualquier otra afección que pueda perjudicar nuestra dentadura, no solo
compromete nuestra salud dental sino también nuestra salud en general. Esta rama ha
evolucionado con el tiempo para la mejora y el cuidado del paciente.
Desde la antigüedad el ser humano, a buscado manera de amortiguar el dolor, de
tal manera que se utilizaban métodos físicos, para producir el letargo en los pacientes
tales como; goldes en la cabeza o pequeños estrangulamientos en los enfermos, y
mitigar el dolor.
En este caso el primer anestésico que se utilizó como una forma de mejorar fue
el uso del éter, por motivos que los pacientes solían exigir un tratamiento sin dolores.
Por lo que es importante identificar la utilidad del éter en la odontología como un
requisito para la relajación muscular.
El éter es un compuesto formado por la unión de dos moléculas de alcohol con la
pérdida de una molécula de agua, no reacciona con facilidad y es bastante estable, es un
líquido volátil, ligero e inflamable, soluble en alcoholes y otros disolventes orgánicos
los álcalis o los ácidos no lo atacan fácilmente. Comúnmente se lo llama éter.
, La fórmula química del éter etílico es la siguiente C4H10O, en la medicina
antiguamente se utilizaba para tratar infecciones pulmonares y la enfermedad del
escorbuto, aunque también se usaba como droga recreativa e impulsó el desarrollo de la
cirugía sin dolor.
En el siglo XIX, el primero en emplear fue Crawford Williamson para la
remoción de quistes en el cuello de un paciente y en el año 1540 Valerius Cordus,
realizo los primeros experimentos de eterización llamándole a su producto vitriolo
dulce y utilizaba para tratar enfermedades como el escorbuto.
William Thomas Green Morton, fue un odontólogo que, en 1846, utilizó por
primera vez el éter como anestésico en una extracción dental en un paciente aquejado de
dolor de muela por una fuerte infección, él mismo que al despertar manifiesta no haber
sentido dolor, corroborando el éxito del uso del éter como anestésico. Sin embargo,
debido a su inflamabilidad se desecho su uso, y sustituido por otros menos peligrosos.
El compuesto conocido como éter, o éter etílico, fue descubierto siglos antes de
que se conociera su efectividad como anestésico, en la actualidad el éter también sirve
para implantes médicos.
Desde el punto de vista odontológico, el biomaterial utilizado en los
implantes médicos es el poliéter éter cetona (PEEK), como material para la
rehabilitación en prótesis dental e implantes ortopédicos, desde prótesis maxilofacial
hasta prótesis parcial fija, coronas y estructuras de prótesis parciales removibles.
El poliéter éter cetona tiene propiedades físicas como; su color y su resistencia a
la fricción, así como sus propiedades mecánicas lo hacen un componente insuperable en
la rehabilitación en el campo de la prótesis dental e implantología.
La Odontología es una rama de las ciencias de la salud, responsable de proteger
la salud bucodental de las personas, previniendo y remediando enfermedades orales
tales como, las caries, las patologías periodontales, hasta procesos quirúrgicos,
traumatismos y cualquier otra afección que pueda perjudicar nuestra dentadura, no solo
compromete nuestra salud dental sino también nuestra salud en general. Esta rama ha
evolucionado con el tiempo para la mejora y el cuidado del paciente.
Desde la antigüedad el ser humano, a buscado manera de amortiguar el dolor, de
tal manera que se utilizaban métodos físicos, para producir el letargo en los pacientes
tales como; goldes en la cabeza o pequeños estrangulamientos en los enfermos, y
mitigar el dolor.
En este caso el primer anestésico que se utilizó como una forma de mejorar fue
el uso del éter, por motivos que los pacientes solían exigir un tratamiento sin dolores.
Por lo que es importante identificar la utilidad del éter en la odontología como un
requisito para la relajación muscular.
El éter es un compuesto formado por la unión de dos moléculas de alcohol con la
pérdida de una molécula de agua, no reacciona con facilidad y es bastante estable, es un
líquido volátil, ligero e inflamable, soluble en alcoholes y otros disolventes orgánicos
los álcalis o los ácidos no lo atacan fácilmente. Comúnmente se lo llama éter.
, La fórmula química del éter etílico es la siguiente C4H10O, en la medicina
antiguamente se utilizaba para tratar infecciones pulmonares y la enfermedad del
escorbuto, aunque también se usaba como droga recreativa e impulsó el desarrollo de la
cirugía sin dolor.
En el siglo XIX, el primero en emplear fue Crawford Williamson para la
remoción de quistes en el cuello de un paciente y en el año 1540 Valerius Cordus,
realizo los primeros experimentos de eterización llamándole a su producto vitriolo
dulce y utilizaba para tratar enfermedades como el escorbuto.
William Thomas Green Morton, fue un odontólogo que, en 1846, utilizó por
primera vez el éter como anestésico en una extracción dental en un paciente aquejado de
dolor de muela por una fuerte infección, él mismo que al despertar manifiesta no haber
sentido dolor, corroborando el éxito del uso del éter como anestésico. Sin embargo,
debido a su inflamabilidad se desecho su uso, y sustituido por otros menos peligrosos.
El compuesto conocido como éter, o éter etílico, fue descubierto siglos antes de
que se conociera su efectividad como anestésico, en la actualidad el éter también sirve
para implantes médicos.
Desde el punto de vista odontológico, el biomaterial utilizado en los
implantes médicos es el poliéter éter cetona (PEEK), como material para la
rehabilitación en prótesis dental e implantes ortopédicos, desde prótesis maxilofacial
hasta prótesis parcial fija, coronas y estructuras de prótesis parciales removibles.
El poliéter éter cetona tiene propiedades físicas como; su color y su resistencia a
la fricción, así como sus propiedades mecánicas lo hacen un componente insuperable en
la rehabilitación en el campo de la prótesis dental e implantología.
