TEMA 1. EDUCACIÓN LITERARIA Y FORMACIÓN DEL LECTOR LITERARIO
I. INTRODUCCIÓN: LA LECTURA LITERARIA COMO LECTURA EMINENTEMENTE ESTÉTICA
II. DE LA ENSEÑANZA DE LA LITERATURA A LA EDUCACIÓN LITERARIA: EL DESARROLLO DE LA
COMPETENCIA LITERARIA
1. TEORÍAS LITERARIAS Y REFERENTES DE LOS NUEVOS ENFOQUES DE LA EDUCACIÓN LITERARIA
2. EDUCACIÓN LITERARIA FRENTE A ENSEÑANZA DE LA LITERATURA. LA COMPETENCIA LITERARIA
3. EDUCACIÓN LITERARIA E INTERCULTURALIDAD
III. LA FORMACIÓN DEL LECTOR LITERARIO COMO OBJETIVO DE LA EDUCACIÓN LITERARIA
1. DIMENSIONES EN LA FORMACIÓN DEL LECTOR LITERARIO: EL FOMENTO DE LA LECTURA Y EL AVANCE
EN LA INTERPRETACIÓN
2. LA EXPERIENCIA LECTORA Y LOS CONOCIMIENTOS PREVIOS EN EL DESARROLLO DE LA COMPETENCIA
LECTO-LITERARIA
3. EXPERIENCIAS INICIALES CON LA LECTURA LITERARIA
IV. PRINCIPIOS DE ACTUACIÓN DIDÁCTICA QUE FAVORECEN EL DESARROLLO DE LA COMPETENCIA
LITERARIA
V. FORMACIÓN EN EDUCACIÓN LITERARIA Y HÁBITOS LECTORES DE LOS FUTUROS MAESTROS
ANEXO. ESTRATEGIAS LECTORAS Y COMPETENCIA LECTORA
1. ¿QUÉ ES LEER?
2. ¿QUÉ HACE EL BUEN LECTOR?
3. ESTRATEGIAS QUE INTERVIENEN EN EL PROCESO LECTOR
4. EJEMPLIFICACIÓN DE ACTIVIDADES PARA DESARROLLAR LAS ESTRATEGIAS LECTORAS ANTES, DURANTE
Y DESPUÉS DE LEER
- El autor sólo escribe la mitad del libro. De la otra mitad debe ocuparse el lector. Joseph
Conrad
, - Estimo tanto los libros, que me los figuro vivientes, y que al leerlos converso con ellos. J.
Swift
- Sólo porque el libro es un mundo podemos entrar en él. Walter Benjamin
- La gente no sabe cuánto tiempo y esfuerzo se requiere para aprender a leer y sacar
provecho de lo leído, yo necesité para eso ochenta años. Goethe
- El verdadero objeto de los libros es engatusar al cerebro para que piense por cuenta
propia. C. Morley
- Si los libros hubieran sido inventados después de los ordenadores, habrían sido
considerados un gran adelanto. J. Jacobson
- Los libros ofrecen mayor intensidad vital, emociones más profundas y, sobre todo, una
conciencia más cabal de las miserias e imperfecciones del mundo real, que siempre
resulta pobre, confuso y mezquino, comparado con los hermosos, magníficos y
coherentes mundos que crea la ficción. Sospecho que de esta manera la literatura
contribuye no a hacer más felices, pero sí menos resignados y más libres a los seres
humanos. (Mario Vargas Llosa)
No está mal : El perro entiende. El cocodrilo llora. La hiena ríe. El loro habla. El hombre entiende, llora, ríe,
habla y además puede leer. De todos los animales de la tierra sólo el hombre puede leer para dejar de ser
animal. ¡No está mal! (Gloria Fuertes)
La verdad de la mentira
Al lector se le llenaron de pronto los ojos de lágrimas, Y una voz cariñosa
susurró al oído: - ¿Por qué lloras, si todo En ese libro es de mentira?
Y él respondió: - Lo sé; pero lo que yo siento es de verdad.
(Ángel González, Nada grave, 2008)
I. INTRODUCCIÓN: LA LECTURA LITERARIA COMO LECTURA EMINENTEMENTE ESTÉTICA
(ROSENBLATT)
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, El modelo de lectura transaccional de Rosenblatt
Rosenblatt plantea un modelo de lectura transaccional. La transacción es un proceso en el cual los
elementos o partes son aspectos o fases de una situación total. Para esta autora, cada acto de lectura es
un evento, una transacción que implica un lector particular y una particular configuración de marcas sobre
una página, ocurriendo en un tiempo particular y en un contexto también particular. Es en virtud del acto
de lectura que alguien adquiere el carácter de lector y es a través de ese mismo acto que el texto adquiere
significación. Pero más aún, en esa transacción que es la lectura, también entran estados orgánicos, ciertos
sentimientos, ciertas relaciones verbales o simbólicas. De la activación de todas esas áreas, la atención
selectiva, condicionada a su vez por múltiples factores sociales y personales va a escoger algunos
elementos que sintetizaría o mezclaría dando lugar “al significado”. En palabras de Rosenblatt:
“El significado no reside ya hecho en el texto o en el lector, sino que sucede durante la transacción entre el
lector y texto” (1988).
De este modo se refiere la propia autora (Rosenblatt, 2001: 14-15) en la Introducción a La literatura
como exploración (México, FCE):
Para muchos, entender esto requiere un cambio del pensamiento dualista tradicional, dejar de pensar en
el lector y el texto como separados y distintos. Decimos: “El lector interpreta el texto” (El lector actúa
sobre el texto), o bien: “El lector responde al texto” (El texto actúa sobre el lector). En vez de ello
deberíamos darnos cuenta de que la acción es recíproca, en un sentido y en otro. Debemos pensar en la
situación, es decir, en la transacción entre los dos que hace posible una obra. Este cambio en los hábitos
de pensamiento requiere de reflexión, y a menudo toma tiempo.
Lectura eferente y lectura estética: dos formas de lectura como parte de un contínuum
Rosenblatt se refería, además, a otro aspecto de enorme importancia para la consideración del proceso de
enseñanza-aprendizaje de la lectura: el de la postura que adopta el lector frente al texto, según se trate de
“retener” lo leído o de “vivirlo”. A la primera Rosenblatt la llama lectura eferente, que significa cargar,
llevar consigo y con ella se refiere a la posición que asume el lector:
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