CASO 2. FRACASO ESCOLAR
ALUMNOS: ALBA CERVELLÓ, LAIA LÓPEZ, ORIOL GUINART,
BREZANA PERIC, TONI TENA
DOCENTE: MARINA ELIAS ANDREU
ASIGNATURA: SOCIOLOGÍA DE LA EDUCACIÓN SECUNDARIA
DOCUMENTO: TRABAJO
MÁSTER: EN FORMACIÓN DEL PROFESORADO
(GEOGRAFÍA E HISTORIA)
CURSO: 2020 - 2021
FECHA DE ENTREGA: 6 DE ENERO DE 2021
, Una vez leído con detenimiento el caso que se nos plantea, consideramos que los elementos
que han influido en las dificultades educativas de Patricia durante los últimos años, pero
especialmente en el último periodo, pueden ser varios. En primer lugar, por lo que se nos
explica, podríamos deducir que el entorno familiar de Patricia procede de un extracto
socioeconómico más bien humilde, pues reside en el barrio de Sants. Según un estudio
estadístico realizado por el Ayuntamiento de Barcelona en 2016, dicho barrio se sitúa casi 15
puntos por debajo de la media de la ciudad (85,2/100) en lo que a renta familiar disponible
se refiere, por lo que se le considera un barrio de renta media baja. Así pues, presuponemos
que el capital económico y cultural del núcleo familiar de Patricia es más bien limitado. Ello
iría en consonancia con lo sostenido por Martín Criado (2018), quien ha establecido una
correlación entre la clase socioeconómica de las familias y el nivel de instrucción de su prole,
según la cual, a mayor poder adquisitivo y estatus social, mayor es el nivel formativo y, por
ende, menor la probabilidad de que los hijos sean víctimas de fracaso escolar o de abandono
prematuro de la escuela/instituto. En cambio, Flaquer (2012) destaca la concepción por parte
de las clases bajas de los estudios como una palanca de movilidad social. Este principio va
en contra del discurso de la meritocracia, que atribuye las notas a la inteligencia y al esfuerzo
individuales, que conforman actualmente el sentido común sobre la escuela. En una dirección
similar a la apuntada por Martín Criado iría el reciente estudio publicado por el Alto
Comisionado para la lucha contra la Pobreza infantil, que alerta de que en España el 45% de
los hijos de padres con estudios básicos se quedan en ese nivel educativo.
Uno de los principales motivos para que el nivel de replicación de estudios entre
padres e hijos de las clases más bajas sea tan elevado es la falta de recursos económicos y de
capital cultural suficientes por parte de los progenitores. Esto dificulta hacer un seguimiento
adecuado de la educación de sus hijos. De hecho, Tarabini (2015), defiende que hay tres
grandes explicaciones para el fracaso escolar: el déficit familiar, la patologización de la
diversidad y la falta de interés. Citando a la autora, nos señala como este hecho va en aumento
y en Cataluña “el estatus social y cultural de las familias condiciona un 23% más los
resultados de los estudiantes a las PISA 2012 de lo que lo hacía en 2003” (Tarabini, 2015, p.
350). La cuestión se traduciría, por ejemplo, en una mayor dificultad por parte de los padres
a la hora de ayudarles con unos deberes que ni ellos mismos seguramente entiendan (bajo
capital cultural) o en la imposibilidad de recurrir a clases de refuerzo o actividades
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