Tema 4. Reflexología, psicología soviética y conductismo
La reflexología rusa
En esta escuela se defiende que la Psicología debe ser objetiva y, para ello, fundamentarse más en
los procesos fisiológicos que en los subjetivos. Toman el concepto de reflejo, procedente de la
fisiología, para explicar los procesos psíquicos. La figura más destacada es Pavlov, premio Nobel
de 1904, que se inspiró en Sechenov, cuyos estudios habían sido divulgados por Bechterev.
La reflexología rusa toma el concepto de reflejo, procedente de la fisiología, para explicar los
procesos psíquicos. Sechenov (1863, "Los reflejos cerebrales"), que se había formado en Europa,
parte de la distinción entre reflejos medulares y cerebrales. Los primeros son producto de la simple
estimulación y están regulados por las estructuras inferiores del sistema nervioso; mientras que los
segundos conforman los movimientos voluntarios y están regulados por las estructuras superiores
del sistema nervioso central. Bechterev populariza el concepto de reflejo y la obra de Sechenov.
Pavlov, el más conocido, establece experimentalmente la distinción entre reflejos condicionados e
incondicionados.
Pavlov también distingue entre el primer sistema de señales y el segundo sistema de señales. El
primero es común a los animales y al hombre, mientras que el segundo es exclusivo de éste. En el
primero se engloban la totalidad de los procesos nerviosos que corresponden a las señales directas
de los objetos. Así, en la fase de aprendizaje, un estímulo condicionado posee un valor de señal que
anuncia al organismo la presencia de un estímulo incondicionado. El segundo sistema de señales lo
forman las palabras y sus relaciones. Las palabras son señales segundas, señales de señales, que
suponen abstracciones de la realidad y constituyen el pensamiento superior, exclusivamente
humano. Este segundo sistema de señales permite las operaciones de generalización y
conceptualización, reflejando de forma simbólica la realidad. Esta diferencia cualitativa entre
hombre y animal se ha convertido en un principio básico de la psicología soviética.
En esta escuela, la psicología se fundamenta más en la fisiología que en lo subjetivo. Se intenta
explicar el pensamiento como una cadena de reflejos, los cuales tienen un sustrato neurofisiológico,
y permiten ser estudiados objetiva y experimentalmente. La psicología objetiva rusa va a pretender
fundar la psicología en la fisiología, para hacer de ella una ciencia positiva. Lo subjetivo, lo
arbitrario, no nos lleva a la verdad. Pavlov rechazó cualquier recurso a un agente interno del tipo
de la mente, el alma, etc., en favor de un análisis del entorno, o estudio de cómo los estímulos
adquieren y pierden sus funciones de señalización y cómo pueden modificar la acción de otras
señales. "Su método del reflejo condicionado permitía estudiar en condiciones de rigurosa
objetividad los procesos puestos de relieve por la filosofía de la asociación. Por otra parte, su
mecanicismo y determinismo coincidían con el espíritu positivista de la psicología occidental"
(Gondra, 1989)
La "psicología objetiva" rusa, va a pretender fundar la psicología en la fisiología, para hacer de élla
una ciencia positiva. Lo subjetivo, lo arbitrario, no nos lleva a la verdad. (Leahey, 1982), Esta
escuela incorporó, desde la segunda mitad del siglo XIX, el concepto de "reflejo" de mano de
Bechterev (1867-1927), para popularizar la psicología de Sechenov, y explicar así los procesos
psicológicos, tanto simples como complejos. Sechenov (1829-1905), quien se formó en algunos
de los mejores laboratorios de Centroeuropa, incluido el de Helmholtz, en su obra "Reflejos del
cerebro" (1863), mantiene que toda acción humana y también los procesos mentales, no son más
, que cadenas complejas de reflejos. En el caso del pensamiento, se supone que tanto la parte sensorial
–el estímulo- como la parte central del reflejo están presente, pero que la parte motora -la respuesta-
está inhibida. Según Sechenov, toda actividad psíquica está iniciada por estimulación externa y es
de carácter reflexivo. Estas ideas del padre del objetivismo ruso tuvieron una fuerte influencia en
Pavlov (1849-1936) y en toda la psicología soviética posterior (Bechterev, Uthomsky, Sokolov,
Anokhin, Razran, etc.).
Sin duda, el representante más conocido de esta escuela de la psicología naciente es lvan Petrovich
Pavlov (1849-1936). Pavlov centrará sus investigaciones sobre la fisiología del sistema nervioso
superior, en el estudio de los reflejos condicionados. Partiendo del estudio de las glándulas
digestivas y las secreciones gástricas, obtuvo el Premio Nobel de medicina en 1904.
Pavlov desarrollará un tratamiento comprensivo y sistemático de los procesos de secreción
aprendida o condicionada -la llamada "secreción psíquica"- (Posteriormente cambiaría este término
por el de "respuesta condicionada"). Tales procesos, según Pavlov, podían ser estudiados desde una
perspectiva puramente objetiva y fisiológica como reflejos adquiridos o condicionados, sin
necesidad de recurrir a la introspección.
Pavlov rechazó cualquier recurso a un agente activo interno (la mente, el alma) en aras de un análisis
del entorno. Prefirió referirse a la "influencia de estímulos externos". El objetivo central del
programa de investigación de Pavlov era el estudio de cómo los
estímulos adquieren y pierden sus funciones de señalización y cómo unas señales -estímulos- pueden
modificar la acción de otras señales.
Pavlov investigó sistemáticamente los reflejos condicionados. Descubrió que las R.C se pueden
producir con E similares a los EC originales ("generalización"). Igualmente, que era posible que un
animal produjera una RC a un estímulo, pero no a otro ("discriminación"). La aportación de
Pavlov en este sentido fue de tal magnitud que prácticamente todos los procedimientos y fenómenos
actualmente conocidos sobre el condicionamiento clásico, llamado también pavloviano, fueron
estudiados por él. La terminología y el lenguaje que se utiliza, actualmente, se debe en gran medida
a él. A nivel teórico, y a pesar de las inadecuaciones del modelo neurológico de Pavlov sobre el
funcionamiento del cerebro, sus conceptos de "excitación" e "inhibición", como principios
explicativos de los procesos subyacentes al condicionamiento, han tenido y tienen todavía una gran
importancia dentro de las teorías del aprendizaje. Sus trabajos se extendieron también al estudio de
los trastornos psicopatológicos -en particular las neurosis experimentales- y las diferencias
individuales en personalidad.
Pavlov (1957) en sus sesiones de trabajo de los miércoles, incorpora la discusión de los temas de
estudio de los funcionalistas, con los que a veces coincidía, y de los psicólogos de la Gestalt, a los
que tilda de dualistas y no comprender el proceso de la "percepción". Sus ideas de que todo
aprendizaje se refiere a respuestas elicitadas por estimulación externa -idea tomada de Sechenov- y
que el mecanismo de todo aprendizaje es el condicionamiento clásico por contigüidad temporal,
entre un estímulo neutral y un estímulo incondicionado o reforzado, serán las principales ideas
reflexológicas que Watson incorporará a su planteamiento conductista, aunque Pavlov siempre
consideró que sus puntos de vista habían sido simplificados en América. Discrepó del conductismo,
especialmente, en la valoración de lo fisiológico, como subyacente el aprendizaje, y de su escala de
valores, realzando la "idea de libre albedrío" y la "dignidad del hombre", temas que recientemente
B.F. Skinner ha considerado "ilusiones no científicas".
La investigación posterior sobre el reflejo alcanza uno de sus máximos desarrollos con los trabajos
de Sokolov (1963) sobre el "reflejo de orientación" y el "reflejo defensivo". A raíz de los trabajos