INTRODUCCIÓN
Tras la crisis de 1898, se generó un fuerte pesimismo en la sociedad española, y en el caso de Europa, esta
época se caracteriza por una crisis espiritual. Durante el periodo de la Restauración surgieron dos
movimientos coetáneos: la generación del 98 y el regeracionismo. La generación del 98 es un grupo de
jóvenes escritores que pretenden renovar el lenguaje narrativo y regenerar la vida pública en un país atrasado
cultural y económicamente. Mientras que el regeracionismo, analiza la situación española para dar
soluciones. La única diferencia es que este movimiento no es estético ni literario. Con el manifiesto de los
tres, estos autores se dan cuenta de que lo que hay que cambiar es la mentalidad española, por esta razón se
produce un giro hacia el idealismo en 1905.
CARACTERÍSTICAS
Los temas tratados por este grupo son el idealismo, las preocupaciones existenciales y el tema de España. En
primer lugar, con el idealismo se plantean ideas de regenerar el país, sobre todo en el carácter social y
político. En segundo lugar, estos autores suelen mostrar en sus obras ideas angustiadas sobre la existencia,
personaje abúlicos y de frágil voluntad. También se encuentra relacionado la inquietud hacia la existencia de
Dios y la inmortalidad del alma. Y por último, se trata el tema de España para regenerar el país de dos
maneras: la tierra, muchos autores viajaron a Castilla ya que de ahí surgió el pueblo castellano; y la historia,
o mejor dicho la intrahistoria “en la vida callada de los millones de hombres sin historia”. Unamuno con
este término quería decir que los verdaderos protagonistas de la historia son aquellas personas que trabajan
cada día formando la economía de un país.
En cuanto a la lengua literaria, hay un exigente cuidado del estilo y lo que se pretende es ir a las ideas, es
decir, adentrarse en las almas. Junto a esto, a un sentido de la sobriedad, decir muchas cosas con menos
palabras, y un gusto por las palabras tradicionales. A su vez, se da un subjetivismo y lirismo, el alma del
autor y el paisaje se funden, y el ensayo se convierte en un nuevo género literario. La novela se esta
generación se interesa por el mundo interior, el paisaje del alma, el narrador se convierte en primera persona
y los géneros se encuentran unidos, ya que hay diálogos que parecen fragmentos teatrales.
AUTORES DEL 98
Miguel de Unamuno: los temas que más emplea son el problema de España y sus dudas existenciales. Con
su novela Niebla, rompe la barrera entre el autor y el personaje. En sus ensayos plantea el problema de
España, pero más tarde, se centra en sus problemas existenciales y da prioridad al mundo espiritual. La obra
más conocida dentro de esta temática es Del sentimiento trágico de la vida. Sus novelas son obras filosóficas
que exponen sus ideas y sus dudas de manera dialogada. Para ello describe las dudas y las contradicciones
de sus personajes y les da importancia a los diálogos porque aparecen otros puntos de vistas del relato. Su
estilo es vivo y expresivo, en el que mezcla términos cultos con otras cotidianas, el uso abundante de las
exclamaciones y juegos de palabras… Sus obras más importantes son Amor y pedagogía (1902), La tía
Tula (1921) y San Manuel Bueno, mártir (1930).
Pío Baroja: la novela de Baroja pretendía aproximar a la vida, por eso el autor propone una estructura abierta
en la que le preocupa la acción. Los personajes son como el autor, “pajarracos del individualismo”, de esta
manera, sus personajes son seres solitarios que se rebelan y luchan por cambiar la sociedad, pero acaban
siendo seres sin esperanza. Baroja utiliza al protagonista de sus novelas como portavoz de sus ideas. Su
estilo es sencillo. Sus frases son cortas y se emplea un léxico sencillo, sus descripciones y diálogos producen
espontaneidad y frescura. El autobiografismo de sus novelas se aprecia en El árbol de la ciencia. Un
estudiante de medicina llamado Andrés Hurtado que ve la existencia como algo hostil que conduce al
protagonista a la depresión, y más tarde al suicidio. Sus novelas están agrupadas en tres trilogías: La tierra
vasca, La lucha por la vida y La raza.
Azorín: Azorín reduce la realidad a impresiones subjetivas e inconexas formando un mosaico de distintas
piezas que darán una visión aproximada, lírica y subjetiva de la realidad. Utiliza la frase breve y la sintaxis
fragmentada en oraciones simples o yuxtapuestas. También da uso a la técnica impresionista en las