ESTÁNDARES HISTORIA DE ESPAÑA
OPCIÓN A
Estándar 5: Explica las diferencias entre la economía y la organización social del
Paleolítico y el Neolítico.
El Paleolítico es el primer periodo de la prehistoria que se inició en el año 5000 a.C. en la
Península junto al proceso de hominización y, por tanto, aparece con ello la sociedad y
economía.
Está dividido en tres etapas: el Paleolítico inferior, el medio y el superior.
En el caso del período del Paleolítico inferior los pobladores se caracterizaban por ser
depredadores, es decir, que no producían alimentos sino que se basaban en la caza, la pesca y
la recolección de frutos. Muchos restos, como los huesos de los animales eran utilizados para
fabricar útiles sencillos. Eran nómadas y se desplazaban dependiendo del clima y los rebaños,
por este motivo su organización social era colectiva ya que no existía la división del trabajo.
Los hallazgos más antiguos de esta época se encontraron en el yacimiento burgalés de
Atapuerca. Más tarde, concretamente en el 1994, se hallaron abundantes restos en la
Península de 800.000 años de antigüedad, que era el Homo antecessor del cual surgen nuevas
especies sucesoras; el Homo Heidelbergensis, surgido hace 250.000 años, el Homo
Neanderthalensis, del cual se han encontrado restos de 45.000 y 35.000 años de antigüedad
en Asturias, Murcia, Valencia y Girona, como del ser humano actual, el Homo sapiens.
Desde el 90.000 a.C. hasta el 35.000 a.C. aparece un nueva era denominada el
Paleolítico medio donde aumenta la presencia del Neardental, descubridor del fuego, en la
Península tal y como evidencia la existencia de numerosos yacimientos como los hallados en
Gibraltar. Estos primeros pobladores de la Península eran depredadores y su supervivencia se
basaba en una caza mucho más desarrollada gracias al fuego que les permitió la
comunicación, convirtiéndose de este modo en el centro de la vida social. Se comienza la
práctica de rituales funerarios.
En el Paleolítico superior, hace aproximadamente 40.000 años, se estableció en la
península una especie procedente del continente africano, el Homo sapiens o también
conocido como hombre Cromañón con rasgos físicos y cognitivos similares a los del ser
humano actual. Esta etapa está asociada al uso de nuevos materiales como el asta o marfil
ricamente decorados, además desarrollaron un universo simbólico y religioso tal y como
refleja la aparición de las primeras manifestaciones artísticas, las pinturas rupestres.
Los restos del Paleolítico son abundantes en la península, y destacan los de las cuevas de La
Pileta, en Málaga, o la cueva de Parpalló, en Valencia.
Existe una etapa entre el Paleolítico y el Neolítico que debido a las transformaciones
climáticas ocasionadas, los humanos se vieron obligados a adaptarse a esas condiciones y
pasaron por un periodo de transición denominado El Mesolítico, que se prolongó entre el
8.000 a.C. y el 5.000 a.C.
, Hacia el 5.000 a.C. aparecieron en la Península Ibérica las primeras comunidades neolíticas.
Se sustituyó la economía depredadora por un modelo de economía productora gracias a la
aparición de producción de alimentos (agricultura y ganadería) y la elaboración de cerámica y
tejidos, como consecuencia de una progresiva sedentarización de los grupos humanos, y
surgieron así las primeras comunidades estables (poblados).
La agricultura y la ganadería propiciaron un incremento demográfico y una mayor
especialización del trabajo, por lo que las sociedades se hicieron más complejas y surgieron
los primeros rasgos de la jerarquía social.
Desde el punto de vista tecnológico se sustituyó la piedra tallada por la piedra pulimentada, lo
que permitió la confección de útiles más elaborados. Además, surgió la industria textil, así
como la cerámica y la cestería, que fueron fundamentales para la conservación de los
alimentos.
En la Península, la interrupción del Neolítico se produjo en torno al 4.000 a. C.
gracias al contacto con otros pueblos del Mediterráneo.