Raúl Vizcaíno
TEMA 8: EL IMPERIO ROMANO
Ya lo tenemos, Roma en el 30 a.C. es un mundo dirigido otra vez por una persona
únicamente. Octavio queda como el único hombre fuerte del estado, ahora tiene lugar la
auténtica jugada maestra: en un momento determinado al recibir los honores amenaza con
dejar la política, todo el mundo sabía que si se retiraba habría una nueva guerra civil, por
lo que lo que tienen que hacer es agasajarlo. El senado le suplica que no se vaya, para que
no se vaya comienza una acaparación de poder en su figura, en el año 27 a.C. se le da el
título de Augustus y Princeps senatus: Princeps significa primero, es decir, el primero del
Senado; luego tenemos un título nuevo “augustus” relacionado con la palabra aumentar,
augur... se le reconoce que esta un paso por encima del resto de la sociedad. Luego ya se
le dan títulos: Se le reconoce como hijo del divino. Tiene el mando militar absoluto... Este
señor sabe lo que le ocurrió a su padre, por lo que acapara lentamente el poder dando la
sensación de que no cambia nada y la república sigue, se produce una monarquía con una
fachada republicana, con tal de evitar que no le maten. Reúne en su persona los poderes
de los tribunos y los censores, tiene el poder consular vitalicio sin ser cónsul, tiene el
título de Pontifex Maximus... En resumen, Octavio reúne absolutamente todos los poderes
posibles de la república en su persona, es decir, se produce la verdadera autocracia. Uno
de los motivos que explican esta condensación de poder y que no se viera una
contramedida de la acumulación de poder es que se sabía que su salida sería resultado de
guerra, después de 6 guerras civiles se busca la paz, la paz se convierte en un elemento
de propaganda política llegando a ser incluso un concepto divinizado. Por eso tenemos
en Roma el monumento del Ara Pacis. La carcasa de este monumento está rodeada de
toda la familia imperial representada, por lo que se une el concepto de paz con la familia
del emperador. La pax romana, se trata de una paz entre romanos, contra los barbaros no
cuenta lógicamente, no se renuncia a las campañas militares. Si Augusto tenía que
demostrar que era el elegido por los dioses debía mostrar victorias militares, no se
renuncia a la continuación de las conquistas. Una de las más importantes tuvo lugar en la
Península Ibérica, no estaba completamente dominada, quedaba parte de Galicia, Asturias
y Cantabria. Se trata de una operación donde intervienen hasta 8 legiones donde
evidentemente Roma sale victoriosa en el 19 a.C. La campaña más importante es la del
norte, campaña en la que va a intentar llevar la frontera del territorio romano al río Elba,
pero va a tener una terrible derrota en Teutoburgo en el 9 d.C., tal era la derrota que se
preveía un levantamiento en Roma debido a las grandes pérdidas que hubo, a partir de
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esta derrota para compensar aumentó el contrato de los legionario de 20 a 25 años. La
línea de frontera se quedó en el Rin. Las provincias ahora se dividen en senatoriales e
imperiales, las que no tienen presencia militar las dirige el senado y las que sí que tienen
son dirigidas por la personalidad imperial. Habrá también una transformación del mapa
político, por ejemplo, en Hispania divide el territorio en 3. Augusto se embarca en un
programa de reformas, por ejemplo, la del cambio del mapa, pero una de las más
importantes se cuestiona qué hacer con el Senado. El senado no va a desaparecer, se le
darán labores importantes: marcan las festividades, competencias judiciales, acuñaban las
monedas... pero siempre bajo la sombra del prínceps senatus, aunque le de poderes
siempre mantiene la última palabra controlándolo, no podía eliminarlo pues así atacaba a
la base republicana. Los comicios por otra parte sí que son eliminados, los magistrados
son nombrados ahora por Augusto. Roma en este momento es una gran metrópolis con
un millón de habitantes, es decir, para el momento es una megápolis. Todas las reformas
de Augusto van a configurar una nueva época, lo que llamamos imperio o principado,
debido al título de prínceps, los romanos llaman a lo que nosotros llamamos emperador
“prínceps”. Una cuestión que estaba clara en este momento es el gran impulso de la
urbanización, fundamental para entender el Imperio Romano. Si una cosa caracteriza al
imperio es la descentralización, a nivel del funcionamiento diario el imperio romano se
puede considerar así. Hay otras unidades a parte del poder imperial que gestionan la vida
del imperio. Tenemos las provincias con su gobernador provincial, divididas en senatorial
e imperiales. Dentro de las provincias están las ciudades, la civitas no es ciudad
unicamente, eso sería urbs, de la palabra civitas viene la palabra civilización, de la misma
manera que los griegos pensaban que el hombre solamente podía sacar su potencial en el
marco de la polis para los romanos era la civitas. El que no vive en una civitas es un
bárbaro, por lo que ciudad no se cierra a lo que pensamos como Madrid, Valencia... sino
los términos municipales. La civitas tiene un núcleo urbano (Madrid, Barcelona...) y un
término municipal. Esta será la célula básica del mundo romano. Desde época de César,
cuando el imperio comienza a expandirse, roma es consciente de aquellos territorios que
conquistan y no tienen ciudades se dan cuenta de la difícil gestión que esto supone, por
lo que se las quiere dotar de una estructura de civitas, esto será muy difícil. Conscientes
de esta carencia vital que era la ausencia de ciudades tanto César como Augusto se van a
lanzar a una política de urbanización en la zona occidental del imperio. Se van a crear
muchas ciudades y aquellas que ya existían y se romanizan se convierten en privilegiadas
ya que dirigirán la urbanización desde ellas. Los veteranos de guerra por supuesto
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formarán parte de la población que nutrirá estas nuevas ciudades. El mundo romano no
se puede entender si no se entiende el funcionamiento de sus ciudades. Por tanto, veremos
como las ciudades tendrán un estatus jurídico. Roma creará ciudades, ciudades que tienen
una diferencia con las polis griegas ya que estas eran independientes, las romanas no, no
son ciudades estados, hay un poder por encima. La ciudad nueva recibe el nombre de
colonia, los habitantes de la colonia de derecho romano son ciudadanos romanos, lo de
colonia latina tienen el derecho latino, aquí la gran diferencia.
Aquellas ciudades creadas antes de la presencia romana a la hora de darles un barniz de
romanización se les da el título de municipium. Hay otras ciudades, las ciudades
indígenas, ciudades dentro del
mundo romano, pero menos
privilegiadas que las anteriores.
Dependiendo de su actitud
hacia roma tendrán una
categoría u otra, actitud
entendida como la colaboración
a la hora de la conquista de
Roma. (en la foto vemos de más privilegiado a menos privilegiado).
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