Belén Tomás García
TEMA 4
GENERALIDADES SOBRE LA FISIOLOGÍA DE LOS ARTRÓPODOS. SISTEMAS
DIGESTIVO, RESPIRATORIO Y CIRCULATORIO. ÓRGANOS DE LOS SENTIDOS Y
SISTEMA NERVIOSO
ORGANIZACIÓN INTERNA DE LOS ARTRÓPODOS – FISIOLOGÍA (de forma genérica, pero no son
todos iguales)
I. SISTEMA DIGESTIVO
El aparato digestivo de los artrópodos consta de:
TRACTO ANTERIOR del tubo digestivo:
La boca es el orificio externo anterior; y posee glándulas salivares, que segregan saliva
formada fundamentalmente por enzimas y posee propiedades antifúngicas y antibacterianas. La
boca es para predigerir la comida.
El esófago suele ser relativamente corto.
También poseen un buche, parecido al de las aves, que tiene la función de almacenamiento
de alimento: el alimento que se va predigiriendo, se almacena en el buche.
La molleja les sirve para triturar el alimento, es donde se termina de predigerir el alimento.
TRACTO MEDIO del tubo digestivo:
En él, se encuentran el estómago y los ciegos gástricos (e intestinales, aunque el intestino
forma parte del tracto posterior), que son expansiones que favorecen la absorción de nutrientes
(aumentan la superficie que absorbe los alimentos).
TRACTO POSTERIOR del tubo digestivo:
En el intestino y en el recto se absorben los iones y el agua, ya que los nutrientes están muy
digeridos ya.
El ano es el orificio externo posterior.
Además, dependiendo del tipo de alimentación del artrópodo, las funciones de la fisiología
están diferenciadas, es decir, en función de la alimentación, variará la fisiología. Los artrópodos
pueden ser:
Fitófagos o herbívoros.
Saprófagos, que se alimentan de materia orgánica animal o vegetal en fase de
descomposición.
Depredadores, que se alimentan de otros organismos.
Parásitos, que viven a costa de otro animal.
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Por tanto, en función del tipo de alimentación las partes del tubo digestivo están más o
menos desarrolladas, o incluso algunas simplemente no se presentan.
II. SISTEMA CIRCULATORIO
El sistema circulatorio de los
artrópodos es abierto: tienen un
corazón, incluso a veces presentan
corazones auxiliares o accesorios, que
bombea la hemolinfa (como la
sangre, pero en Artrópodos) que baña
todos los órganos y sistemas del
cuerpo del animal.
La función fundamental de la hemolinfa es el transporte de nutrientes para que éstos puedan
ser transferidos a todas las células del cuerpo del artrópodo. Los pigmentos de la hemolinfa, que
favorecen el transporte de nutrientes, pueden ser diferentes:
Hemocianina en el caso de los crustáceos y los quelicerados, que le da un color azul
Hemoglobina en el caso de los insectos.
Dentro del sistema circulatorio encontramos diferentes elementos, aunque no existen las
venas o arterias, no hay vasos sanguíneos como en el ser humano:
Hay un corazón tubular metamerizado: en él hay
cámaras metamerizadas y un par de ostiolos por cámara
(cada metámero está asociado a un tagma).
Los ostiolos son aberturas del corazón tubular que
se disponen en número par en función de los metámeros
del cuerpo del animal.
La hemolinfa penetra en el corazón a través de los ostiolos y se
expulsa hacia delante, es decir, hacia la cabeza, irrigando así las
antenas, los ojos, etc. del animal; y continúa por todo el cuerpo,
penetrando de nuevo por los ostiolos. Por tanto, la función del
corazón es proyectar la hemolinfa hacia delante, que bañará todo el
cuerpo y regresará por los ostiolos.
Se trata de un sistema abierto porque la
hemolinfa solo sale una vez, bañando todo el
cuerpo del Artrópodo y luego es recogida a través
de los ostiolos del cuerpo (un par por metámero).
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