Tema 1: la tragedia de los comunes y la explicación de los fenómenos sociales
Texto 1 → La tragedia de los comunes (Garret Hardin)
Los bienes son comunes y esto es lo que origina problemas.
Cuando la gente actúa racionalmente se denomina dilema social (denominado así por los
psicólogos), porque sus actos pueden llevar a un acto irracional.
En el texto se encuentra la interdependencia estratégica.
Como introducción, lo común nos viene a decir que es un régimen de propiedad. No es algo
físico, sino que son unos determinados bienes (los cuales son comunes y por ello, originan
problemas) sometidos a un régimen de propiedad.
Nos encontramos con dos tipos de propiedad:
Propiedad privada → Lo que caracteriza a esta propiedad es la exclusividad, ya que
nosotros tenemos la exclusividad de usar nuestras propiedades.
Propiedad común es cuando todos pueden acceder a él sin que quepa excluirlos.
Sin embargo, sí puede haber una exclusión porque el grupo puede estar formado por
algunas personas solamente, no por toda la sociedad.
Además, cuando un bien es compartido por un grupo de personas se necesita un régimen
de propiedad.
En el ejemplo que nos muestra Hardin de los pastores vemos que nos hace dos cuestiones, y la
explicación de Foster Lloyd nos viene a decir que es el resultado de las acciones de diferentes
pastores que terminan devastando la propiedad compartida. Es la suma de las consecuencias de
muchos actos individuales (ejemplo, la contaminación). Esto nos lleva a entender el fenómeno
social como acciones individuales.
En el calentamiento global lo que se discute es si los seres humanos tienen un efecto causal en el
calentamiento, no sobre el mismo calentamiento, ya que esto no requeriría ninguna intervención
directa al ser humano.
Por tanto, lo que produce el desencadenamiento de esa causa son las acciones.
Sin embargo, Hardin va más allá mencionando el egoísmo, mostrando que estas acciones las
realizan por ser egoístas.
¿Cómo el egoísmo se traduce en un determinado tipo de acción? Hardin lo plantea de la siguiente
manera: cada pastor realiza un cálculo de maximización, es decir, qué es lo que más le
convienen a los pastores; la acción como el resultado del coste de beneficios.
El agente hace un cálculo para ver qué le conviene (si añadir más cabezas al rebaño o que se
quede como está) para buscar lo que le beneficia maximizándolo, de manera que aquí entra el
egoísmo (a esto se le denomina elección racional = hay un modelo de comportamiento).
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, Además, hay una explicación intencional que es vista como el cálculo del resultado de un coste
de beneficio; ver como se distribuyen coste y beneficio.
Sin embargo, el problema de los comunes presenta un dilema social (los agentes envueltos en
una situación terminan todos peor) y es que si añado una cabeza de ganado más me beneficia a
mí, pero los costes en términos de pasto recaen sobre la comunidad. Los beneficios son
individuales, pero socializamos los costes.
Esto nos puede llevar a una sobrexplotación si cada uno añade una cabeza de ganado, ya que los
costes serían mayores.
Todo esto nos lleva a una explicación de ciencias sociales porque se encuentra la mano de
hombre, es decir, sus acciones.
Además, esa intencionalidad acude a la elección racional (el comportamiento que realiza es el
resultado de un cálculo bajo el coste de su propio interés).
Le lleva a la ruina porque son muy racionales; es la elección racional la que nos lleva al
problema.
Y nos preguntamos, ¿cómo múltiples elecciones racionales nos llevan a algo irracional? Smith
nos dice que cada uno mirando por sí y por los demás habrá una prosperidad general que no
estaba en su vida. Pero lo que nos muestra Hardin es la cara de la otra moneda, la mano invisible
que hay.
Además, hay un elemento que falta: cada uno actúa por su cuenta y por coincidencia todos hacen
los mismos cálculos. Todos se encuentran en un entorno paramétrico (no hay otros agentes;
cada uno toma sus decisiones sin contar con los demás).
Sin embargo, en realidad, si esto queremos plantearlo en términos analísticos, debemos
plantearlo de forma estratégica. Los agentes están situados en un entorno estratégico realmente.
No es solo que los pastores decidan por su cuenta, sino que también debemos ver lo que los otros
van a decir para saber cómo actuar y que nos beneficie a posteriori.
En este contexto podemos mencionar el juego de Kollock llamado el dilema del prisionero:
supongamos que, en un grupo de personas, cada uno recibe un sobre y cinco euros. Tendrán que
pasar el sobre a otra persona. Pueden elegir entre pasarlo vacío o con los cinco euros dentro,
sabiendo que el valor del contenido del sobre se multiplica por dos. Por tanto, el agente tiene
varias opciones:
1. Quedarse sus cinco euros, en cuyo caso:
a) El compañero también se los quedará. Cada uno tendrá cinco euros.
b) El compañero los meterá en el sobre, de modo que el agente obtendrá 15 euros (cinco
suyos más los cinco del compañero, cuyo valor se dobla) y el compañero 0.
2. Dar los cinco euros, en cuyo caso:
a) El compañero también los dará, y, como el contenido del sobre se multiplica por dos,
cada uno tendrá diez euros.
b) El compañero se quedará sus cinco euros, de modo que ganará 15 y el agente 0.
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