-SISTEMA NERVIOSO AUTÓNOMO, ANATOMÍA Y
FISIOLOGÍA CON ESQUEMAS
- PIEL ANATOMÍA, Y LOS GRADOS DE
QUEMADURAS CON SUS EFECTOS
PATOLÓGICOS EN TODOS LOS SISTEMAS DEL
CUERPO.
Trabajo tercera evaluación parcial
Centro de Rehabilitación del DIF Iztapalapa
Luis Angel Menchaca Perea
,Introducción:
El sistema nervioso autónomo y el sistema endocrino controlan el medio interno
del cuerpo. El sistema nervioso autónomo es el que permite el control preciso y
fino de las funciones de muchos órganos y tejidos, incluidos el músculo cardíaco,
el músculo liso y 665 las glándulas exocrinas.
El sistema endocrino, mediante las hormonas circulantes en la sangre, ejerce un
control más lento y difuso.
El sistema nervioso autónomo, al igual que el sistema nervioso somático, tiene
neuronas aferentes, conectoras y eferentes. El impulso aferente se origina en los
receptores viscerales, y tiene un trayecto por las vías aferentes hacia el sistema
nervioso central, donde se integran mediante las neuronas de conexión a
diferentes niveles, para dirigirse posteriormente hacia los órganos efectores, a
través de las vías eferentes. La mayoría de las actividades del sistema nervioso
autónomo no afectan al estado de consciencia.
Las vías eferentes del sistema autónomo están constituidas por neuronas
preganglionares y posganglionares. Los cuerpos celulares de las neuronas
preganglionares se encuentran en la columna gris lateral de la médula espinal y a
nivel de los núcleos motores de los nervios craneales III, VII, IX y X. Los axones
de estos cuerpos neuronales establecen sinapsis con los cuerpos de las neuronas
posganglionares, que se reúnen formando los ganglios, externamente al sistema
nervioso central. El control ejercido por el sistema nervioso autónomo es
extremadamente rápido.
También es extenso, dado que un axón preganglionar puede establecer sinapsis
con varias neuronas posganglionares. Los plexos autónomos del tórax, abdomen y
pelvis están formados por grandes colecciones de fibras aferentes y eferentes,
junto con sus ganglios asociados.
Los receptores viscerales son los quimiorreceptores, los barorreceptores y los
osmorreceptores. En las vísceras se encuentran receptores del dolor, y ciertos
tipos de estímulos, como la falta de oxígeno y el estiramiento, pueden ocasionar
dolor extremo. La información proporcionada en este capítulo se utiliza mucho en
la práctica clínica. Los ejemplos de inervaciones autónomas comentados son
relevantes y suelen utilizarlos los clínicos para establecer diagnósticos.
, ORGANIZACIÓN DEL SISTEMA NERVIOSO AUTÓNOMO
El sistema nervioso autónomo se distribuye a través del sistema nervioso central y
periférico. Se divide en dos partes, el simpático y el parasimpático y, como se ha
indicado previamente, está constituido por fibras aferentes y eferentes.
Esta división entre sistema simpático y parasimpático se realiza con base en
diferencias anatómicas, diferencias en los neurotransmisores y diferencias en los
efectos fisiológicos. Los sistemas simpático y parasimpático originan efectos
opuestos en la mayoría de los órganos, y por ello se consideran antagonistas
fisiológicos. Sin embargo, debe quedar claro que ambas divisiones trabajan en
conjunción mutua, y que es el balance de sus actividades lo que mantiene
un medio interno estable.
Parte simpática del sistema autónomo
El sistema simpático es la mayor de las dos partes del sistema autónomo, y se
distribuye ampliamente a lo largo del cuerpo, inervando el corazón y los pulmones,
los músculos de las paredes de muchos vasos sanguíneos, los folículos pilosos y
las glándulas sudoríparas, así como las vísceras abdominopélvicas.
La función del sistema simpático es preparar al cuerpo para una emergencia. La
frecuencia cardíaca se acelera, las arteriolas de la piel y del intestino se contraen,
las arteriolas del músculo esquelético se dilatan, e incrementa la presión arterial.
Se produce una redistribución de la sangre, de modo que ésta abandona la piel y
el tubo gastrointestinal, pasando al cerebro, al corazón y al músculo esquelético.
Además, los nervios simpáticos dilatan las pupilas, inhiben los músculos lisos de la
pared de los bronquios, del intestino y de la pared de la vejiga, y cierran los
esfínteres. Se produce piloerección y sudoración. El sistema simpático está