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, Tema 1: Los géneros interpretativos
El afán de comunicar
Conocemos la vida de los seres humanos en tiempos pasados gracias a las distintas huellas
dejadas por hombres y mujeres. Cuando llenaban las paredes de la cueva de formas y colores,
efectuaban un acto de comunicación y una voluntad de expresar hechos vividos, sentido u observados.
El hombre es un animal social que ha modificado el entorno y su relación con él mediante la
comunicación.
Además de la necesidad de comunicar, el hombre ha tenido la necesidad de conocer y
preguntarse por lo que sucede más allá de las fronteras y de sus límites habituales. Existe una
preocupación por la transmisión de la idea (“cómo”) y por las formas de captar el interés de la
audiencia a través de la persuasión, selección y convencimiento.
La dialéctica de Platón, la retórica de Aristóteles y la pragmática de Cicerón ofrecen y enseñan
las claves básicas para organizar con arte y eficacia las partes de un discurso: organización de las
ideas, apoyo de los recursos literarios, expresión de ideas con claridad y elegancia… Aristóteles es el
padre de la organización teórica del discurso; y Platón, del modelo de la estructura organizativa
(presentación, narración, testimonio, pruebas, probabilidades y recapitulación).
También existe una preocupación por las audiencias. La plenitud del discurso llega al difundirse
ante una audiencia y al existir un receptor que lo recibe, capta y procesa. Por lo tanto, el objetivo del
emisor es saber cómo llegar y calar con su mensaje en la hipotética, imaginaria y estudiada audiencia.
Existen tres inquietudes principales implícitas en la elaboración del discurso:
⎯ El afán de informar.
⎯ La utilización del método y la estructura adecuada.
⎯ La persuasión o convencimiento de las audiencias para ganar dinero y poder
seguir realizando sus funciones (formar, informar, entretener).
El ciclo formativo o comunicacional concluye con la respuesta o elaboración que finalmente hace
la recepción (audiencia) con el discurso, inmediatamente o a más largo tiempo. Si no hay receptor, que
busca los contenido que se adaptan a sus valores, no se sabe la relevancia de una información, de ahí
su importancia.
Existe la diferencia entre informar o comunicar:
⎯ Informar: dar noticia de algo, enterar. Es un mensaje de apariencia objetiva y
anónima en cuanto a autoría e implicación periodística. Suelen ser noticias en
medios impresos.
⎯ Comunicar: hacer a otro partícipe de lo que uno tiene, hacer saber a alguien
cierta cosa. Presupone una presencia implícita o explícita del elemento humano,
de un sujeto que comunica un hecho. Son mensajes difundidos en medios
audiovisuales (radio, televisión).
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, El debate necesario sobre los géneros
Los géneros son una expresión de vitalidad del periodismo, una manifestación de la relación
dialéctica y del dialogo entablado entre las tendencias dominantes en un momento histórico con las
nuevas expresiones o variaciones que van surgiendo
La historia de los géneros periodísticos es una historia de evoluciones, transformaciones y
complejidades íntimamente relacionadas con el momento histórico. La práctica periodística enseña que
no se puede entender los géneros periodísticos como textos rígidos o estancos.
En la actualidad, la división entre géneros es defendida a capa y espada por los responsables de
las secciones de opinión de los principales diarios, y argumentan la necesidad de vigilar y respetar las
normas que los separan, lo que ha incrementado los géneros híbridos.
El periodista escribe inevitablemente en géneros, que funcionan para él como cauces o modelos,
además de cumplir determinadas funciones sociales, de ahí su importancia.
La noticia pura y la interpretación
Frente al poder de los medios audiovisuales, la prensa ofrece una variada oferta de texto. Por
su riqueza expresiva, cabe destacar los interpretativos y los argumentativos: entrevista, crónica,
columna y crítica.
Además de los hechos, estos textos incorporan valoraciones, juicios y opiniones sobre los mismos;
tiene tanta importancia “cómo se cuenta” que “qué se dice”. Pero no es lo mismo valorar que opinar:
interpretar es una valoración objetiva basada en antecedentes y exposición comprensiva de los
acontecimientos; opinar es un juicio subjetivo.
Toda noticia debe su existencia mediática a un acto previo de valoración e interpretación, ya
que el acontecimiento ha sido seleccionado entre otros muchos acontecimientos para ser elaborado
como noticia. Después, otras muchas decisiones afecta a su representación final: jerarquía, ubicación,
apoyos, imágenes…
Si se informa de algunos hechos u opiniones que se salen del sistema es como coartada de la
inexistencia de censuras o de valores impuestos. Mariano Cebrian afirma que “la televisión vela por el
mantenimiento de los sistemas de valores establecidos, prohibiendo aquellos mensajes con
determinadas cargas denotativas o connotativas que los subviertan o ataquen. Todo está permitido
hasta que no se ataquen las bases de esos sistemas de valores”. La preparación, elaboración,
escritura y presentación requiere tiempo, mimo y cuidados especiales.
Los textos informativos de creación
Este tipo de textos rompen con los géneros tradicionales y sus estructuras, aportan
innovaciones y tienden a mostrar más que a decir (no describen, reconstruyen escenarios). Utilizan la
técnica de transcripción del diálogo en su totalidad, se recurre a artificios expresivos y gráficos y
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